La cara de Dior Homme, con una película del dúo francés The Blaze que se estrenará en la primavera, cuenta quiénes son los hombres de hoy. Y cómo será el próximo Bruce Wayne.
En mayo pasado, mientras Robert Pattinson estaba en un vuelo de Los Ángeles a Cannes, donde iba a presentar su última película, The Lighthouse, salió la noticia de que Warner Bros estaba pensando en él para el papel de Batman.. Como todavía no había hecho una audición, y mucho menos había firmado el contrato, y como todo tenía que estar envuelto en absoluto secreto, el actor inglés entró en pánico. «Estaba furioso. Y conmigo todo mi equipo», habría dicho meses después. "Realmente pensé que iba a ser omitido". Pero no fue así: el anuncio oficial de que Robert Pattinson usará el traje negro ya despertó el entusiasmo de los fanáticos de Batman y pudo disfrutar de declaraciones mucho más relajadas: "Hay algo en Batman que me hizo sentir siempre atraído. Las películas sobre él siempre atrajeron a muy buenos directores, que hicieron que los actores actuaran con igual talento. Este personaje tiene una herencia y un linaje que van más allá de las grandes tomas".
Desde que interpretó a Edward Cullen en la serie Twilight, entre 2008 y 2012, Robert Pattinson nunca dejó de estar en la cima de la fama, incluso si últimamente logró reputación a su manera. El éxito de la saga, más de tres mil millones de dólares en todo el mundo, podría haberlo convertido en una máquina de dinero, una situación similar de la que se encontró Leonardo DiCaprio después de Titanic, en 1997. Ambos actores, aunque pertenecían a diferentes generaciones y con todas las distinciones del caso, en su lugar, optaron por continuar la carrera de una manera completamente diferente a la de las elecciones fáciles.
DiCaprio confiando en Scorsese, Pattinson en el aún más difícil y menos comercial David Cronenberg que lo quería en Maps to the Stars y Cosmopolis, y luego continuando con James Gray (The Lost City of Z), los hermanos Safdie (Good Time), Claire Denis (High Life), David Michôd (The Rover y The King ) hasta Christopher Nolan con quien filmó su nueva película de acción, Tenet, en los cines en septiembre.
"Cuando sos un inglés alto, todos terminan imaginándote perfecto en los dramas de época del siglo XIX", dice. En cambio, trabajar con directores tan diferentes agregó internacionalidad a su imagen, tanto que el público casi olvidó que él es británico en el fondo. "Definitivamente disfruto estar asociado con muchos países diferentes en lugar de ser identificado como muy, muy inglés", dice. Su modernidad también está aquí, en ser cosmopolita, en pertenecer al mundo, más que a una sola nación. Si tiene que elegir entre Nueva York y Londres, por ejemplo, dice que "Londres es más disperso. Nueva York es pura locura. No hay un área comparable al centro de Manhattan, nada en Londres realmente tiene esa intensidad, esos restaurantes llenos de gente en todas partes, tantos olores diferentes. Londres parece un poco más relajado en comparación. En Nueva York hay una energía súper intensa. Grabé algunas películas ahí y todas son muy vigorosas. Últimamente estuve seguido ahí para participar en grandes estrenos y cosas así. Por lo general, solo me quedo cuatro días, como máximo cinco. Y generalmente salgo cada minuto del día, casi nunca estoy descansando. Al final necesito dormir por tres semanas. No puedo entender cómo la gente puede vivir toda su vida en Nueva York, de verdad". También será por esta razón que se comprometió con una londinense, Suki Waterhouse, modelo y actriz: los últimos chismes incluso los dieron como al borde del matrimonio.
Nueva York, sin embargo, sigue siendo la ciudad que también lo atrae más cinematográficamente. "Scorsese, De Niro, Woody Allen... Los años 70 fueron fantásticos, especialmente los actores. No podes evitar verlos en esas películas y reflexionar. Hay una especie de virilidad en su forma de actuar. Son películas modernas, ya proyectadas para el futuro. Es una cuestión de energía. Solo pensá en Taxi Driver o Goodfellas: hay Nueva York, pero sobre todo hay actuación, música, algo que casi se puede tocar. Martin Scorsese, especialmente en ese período, capturó la energía de la ciudad. Cuando miro Taxi Driver, no sé cómo explicarlo, pero me da un impulso. Es una película muy poderosa y no creo que sea solo por las imágenes, sino por el alma dentro de ella".
Durante años, Robert Pattinson estuvo practicando boxeo, como Robert De Niro en Raging Bull, otra de sus películas de culto. «En realidad, solo puedo tomar lecciones de vez en cuando, pero siempre me gustó. Por el contrario con el baile estoy negado».
Desde 2013, Pattinson también es la cara de Dior Homme. La nueva campaña se lanzará en la primavera, completando con una película promocional dirigida por el dúo francés The Blaze. "Me alegra que la escena de baile se muestre en cámara lenta", admite. “A velocidad normal sería mucho más ridículo. Ciertamente no soy del tipo que va solo a la discoteca y comienza a bailar". El video recuerda la atmósfera de sus películas favoritas y en las que Pattinson interpreta a un modelo de hombre moderno, lejos de los estereotipos machistas, vulnerable y frágil. Y el tema ofrece un punto de partida para la reflexión.
«Ser hombre es una progresión. Creo que en 2020 se encuentra entre los elementos tradicionales, donde el macho es lo suficientemente fuerte y decidido y hace cualquier cosa que desee, y una profunda sensualidad. Creo que ser un hombre hoy significa más de lo mismo, incluyendo la agresión y la vulnerabilidad. Y también la libertad de interesarse por las telas y los perfumes, por qué no».
En su estilo, dice que en los últimos seis años cambió mucho, porque perdió la timidez y hoy se atreve mucho más. «Ahora siento que soy un poco más vanguardista. Trabajar con Dior te hace sentir protegido, porque estar asociado con una marca atemporal te brinda seguridad. Cuando tenes la oportunidad de hacer el ajuste con el diseñador en persona, te sentís mucho más consciente de lo que elegís usar. Entonces sí, en general siento que me volví un poco más experimental con los años. Amo todo lo que diseña Kim Jones, aunque quizás solo, es posible que nunca haya elegido el esmoquin con pantalones cortos (look que usó en el Festival de Cine de Nueva York 2018). Satén, gasa... Me encantan estas telas, aunque tengo la tendencia de usar siempre las mismas cosas en la vida cotidiana».
Fotos de Mikael Jansson para Parfums Christian Dior
Fuente | Traducción allyouneedisrob
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