De The Cult Den
'Cosmopolis' resulta ser una representación excepcional y sin fisuras de la situación actual. El personaje de Eric Packer sirve casi como un mártir de hoy en día. Su abrumadora sensación de aislamiento del mundo real o la creciente desilusión que viene con ser rico, parece implacable en su persecución a rechazar mortalmente cualquier forma de asociación con el mundano estilo de vida .
En un papel real de juego cambiante, Pattinson hace su trabajo más completo y seguro hasta la fecha. El anclaje de la película, con un carisma y aplomo meticuloso y atractivo hacen que finalmente los escépticos puedan descansar en cuanto a sus capacidades de actuación.
Cronenberg ciertamente no ha optado por el enfoque de "hack and slash 'aquí ni en su interpretación de la obra de DeLillo. Los segmentos casi trabalenguas y largos del diálogo literalmente arrancados de las páginas son audazmente fieles. Los no iniciados quizás se quedarán atónitos por tal jerga liosa e inteligente, a otros les resultara refrescante y cautivadora. Si bien su estilo de dirección sigue siendo íntimo y preciso, desde luego, no se asusta de las metáforas visuales tampoco. Un atractivo especial es la participación de Pattinson para hacer frente al antagonista Paul Giamatti / Benno Levin , enmarcado dentro de un exquisito y amplio ángulo haciendo hincapié en la división de clases entre los ricos y una clase obrera descontenta.
Abrumador en su deconstrucción de temas tan diversos, es sin duda muy inusual y talky (no encuentro traduccion) por la corriente principal. Para la mente más abierta entre nosotros, sin embargo, 'Cosmopolis' es una pieza fascinante del cine, saturado de resonancia social y el intelecto que se merecen sus complejidades que hay que descifrar.
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De Static Mass Emporium
Una de Las mejores películas, los que tendemos a amar de verdad, inspira una mezcla de placer y admiración. Sentimos la emoción de la trama, mientras disfrutas de la actuación. Además somos a menudo capaces de relacionarnos con los valores fundamentales de la pieza, extrapolando, correctamente o no, los temas del cineasta y los objetivos. Su punto. En ocasiones, sin embargo, los créditos de una película se enrollan la pantalla y nos encontramos confundidos por algo que es absolutamente fascinante, pero al mismo tiempo desconcertante. Y así, es Cosmópolis.
Aceptar plenamente el estilo del material de origen, Cosmópolis es un completo distanciamiento y, a veces, extraño asunto sencillo. Si esto es en sus imágenes nítidas y su entrega al diálogo rebuscado y extraño, su estructura, su viñeta CGI deliberadamente irreal o sus significados ocultados, no vamos a ser empujados pero nos obliga a ir. Esto realmente me llamó la atención a lo largo de los dos visionados y, en mi opinión, fundamental para la creación del personaje de Eric Packer desde el principio.
Disfrazado detrás de sus gafas oscuras, y escupiendo esotérico seudo-filosoco intelectual, Robert Pattinson es magnético como el joven multimillonario (para mi sorpresa). A medida que pasa el día en el coche, se nos muestra un retrato de un hombre que se ha distanciado de la realidad. Él habita en un plano de existencia donde la gente no se comporta como los otros en la calle y, como tal, representa la desconexión muy probable entre el 1% y el mundo real. Normalmente empatizamos con un protagonista porque entendemos lo que siente, aquí Cronenberg quiere lo contrario, él está tratando de engendrar en nosotros lo que no siente Eric. No estamos necesariamente para entender lo que está hablando cuando se hace preguntas como: "¿Pero qué pasa con todas las limusinas que merodean la ciudad durante todo el día? ¿Donde pasan la noche? "
Hay sin duda un montón más que se puede decir sobre Cosmopolis (incluso en este pedazo de cosas mencionadas no he sido capaz de explorar más a fondo), y estoy seguro de que hay una miríada de otras lecturas, igualmente interesantes. Todo lo que sé es que, si bien no es de ninguna manera prefecta, es absolutamente fascinante y tengo ganas de leer el libro de DeLillo. Una vez hecho esto, puedo tener más información, sobre la película de Cronenberg.
De Filmblerg
La revuelta contra Packer se manifiesta en tres formas. La primera es una protesta violenta de incontables semi-anarquistas con un ídolo, la rata, que no es capaz de penetrar en su limusina. El segundo es el del arte, en una escena bizarra de humillación por un chef de repostería renegado. Se trata de un esfuerzo más memorable pero necesita desesperadamente el vándalo para preservar y reproducir su idea. Por último, está la amenaza de asesinato por parte de un individuo ( Paul Giamatti ), pero no es más que el último grito del psicópata solitario vengativo que solo quiere hacerse notar, que se recuerde su nombr -, pero nunca supimos su nombre en el primer lugar.
David Cronenberg no ha escrito un guión independiente desde Crash , y aquí con Cosmopolis , se retira la misma teología del hombre y de la máquina que se ha hecho tan singular en su vida. Pocos directores podrían reclamar tal trascendencia. En Crash, antes de la cumbre artística de Cronenberg, sus personajes son sostenidos por una energía sexual que puede ser aprovechada a través de la participación en accidentes de tráfico. Packer, sin embargo, es insensible a los extremos de la física o experiencia sexual. Él es incapaz de experimentar - como todo conocimiento es de segunda mano - su (nuestro) mundo está desprovisto de sentimientos nuevos o pensamientos originales.
Cosmopolis es revolucionaria, incluso si ello implica la inutilidad de la revolución. El capitalismo se conoce como un "fantasma", ya que no pueden ser amonestados con la reprimenda de sus benefactores. La frase "Un fantasma obsesiona a este mundo, el espectro del capitalismo" es, en sí misma, una proyección, pero sugiere algo menos efímero, puede ser digitalizada, movilizada y aburguesada - en realidad es un artificio del hombre para la eternidad. Aunque promocionada como una odisea de guerra, violencia y sexo, el terror de la película está en su inactividad, es indiferente, y de inercia inquebrantable. Sin duda, es la obra maestra del apocalíptico 2012.
Vía | Vía, Traducción y Adaptación PattinsonWorld
Una de Las mejores películas, los que tendemos a amar de verdad, inspira una mezcla de placer y admiración. Sentimos la emoción de la trama, mientras disfrutas de la actuación. Además somos a menudo capaces de relacionarnos con los valores fundamentales de la pieza, extrapolando, correctamente o no, los temas del cineasta y los objetivos. Su punto. En ocasiones, sin embargo, los créditos de una película se enrollan la pantalla y nos encontramos confundidos por algo que es absolutamente fascinante, pero al mismo tiempo desconcertante. Y así, es Cosmópolis.
Aceptar plenamente el estilo del material de origen, Cosmópolis es un completo distanciamiento y, a veces, extraño asunto sencillo. Si esto es en sus imágenes nítidas y su entrega al diálogo rebuscado y extraño, su estructura, su viñeta CGI deliberadamente irreal o sus significados ocultados, no vamos a ser empujados pero nos obliga a ir. Esto realmente me llamó la atención a lo largo de los dos visionados y, en mi opinión, fundamental para la creación del personaje de Eric Packer desde el principio.
Disfrazado detrás de sus gafas oscuras, y escupiendo esotérico seudo-filosoco intelectual, Robert Pattinson es magnético como el joven multimillonario (para mi sorpresa). A medida que pasa el día en el coche, se nos muestra un retrato de un hombre que se ha distanciado de la realidad. Él habita en un plano de existencia donde la gente no se comporta como los otros en la calle y, como tal, representa la desconexión muy probable entre el 1% y el mundo real. Normalmente empatizamos con un protagonista porque entendemos lo que siente, aquí Cronenberg quiere lo contrario, él está tratando de engendrar en nosotros lo que no siente Eric. No estamos necesariamente para entender lo que está hablando cuando se hace preguntas como: "¿Pero qué pasa con todas las limusinas que merodean la ciudad durante todo el día? ¿Donde pasan la noche? "
Hay sin duda un montón más que se puede decir sobre Cosmopolis (incluso en este pedazo de cosas mencionadas no he sido capaz de explorar más a fondo), y estoy seguro de que hay una miríada de otras lecturas, igualmente interesantes. Todo lo que sé es que, si bien no es de ninguna manera prefecta, es absolutamente fascinante y tengo ganas de leer el libro de DeLillo. Una vez hecho esto, puedo tener más información, sobre la película de Cronenberg.
De Filmblerg
La revuelta contra Packer se manifiesta en tres formas. La primera es una protesta violenta de incontables semi-anarquistas con un ídolo, la rata, que no es capaz de penetrar en su limusina. El segundo es el del arte, en una escena bizarra de humillación por un chef de repostería renegado. Se trata de un esfuerzo más memorable pero necesita desesperadamente el vándalo para preservar y reproducir su idea. Por último, está la amenaza de asesinato por parte de un individuo ( Paul Giamatti ), pero no es más que el último grito del psicópata solitario vengativo que solo quiere hacerse notar, que se recuerde su nombr -, pero nunca supimos su nombre en el primer lugar.
David Cronenberg no ha escrito un guión independiente desde Crash , y aquí con Cosmopolis , se retira la misma teología del hombre y de la máquina que se ha hecho tan singular en su vida. Pocos directores podrían reclamar tal trascendencia. En Crash, antes de la cumbre artística de Cronenberg, sus personajes son sostenidos por una energía sexual que puede ser aprovechada a través de la participación en accidentes de tráfico. Packer, sin embargo, es insensible a los extremos de la física o experiencia sexual. Él es incapaz de experimentar - como todo conocimiento es de segunda mano - su (nuestro) mundo está desprovisto de sentimientos nuevos o pensamientos originales.
Cosmopolis es revolucionaria, incluso si ello implica la inutilidad de la revolución. El capitalismo se conoce como un "fantasma", ya que no pueden ser amonestados con la reprimenda de sus benefactores. La frase "Un fantasma obsesiona a este mundo, el espectro del capitalismo" es, en sí misma, una proyección, pero sugiere algo menos efímero, puede ser digitalizada, movilizada y aburguesada - en realidad es un artificio del hombre para la eternidad. Aunque promocionada como una odisea de guerra, violencia y sexo, el terror de la película está en su inactividad, es indiferente, y de inercia inquebrantable. Sin duda, es la obra maestra del apocalíptico 2012.
Vía | Vía, Traducción y Adaptación PattinsonWorld
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